La campaña de producción de aceite de oliva sigue su curso con datos que reflejan una situación compleja para el sector. Como publica Álvaro Gayán en ABC, según las cifras publicadas por el Ministerio, hasta finales de noviembre se habían producido 292.019,86 toneladas de aceite de oliva, de las cuales 255.742,62 toneladas corresponden al mes de noviembre.
Las salidas al mercado durante este mes se sitúan en torno a 103.910 toneladas, superando en más de 6.000 toneladas las registradas en la misma fecha de la campaña pasada. En cuanto a las existencias, los datos indican que las almazaras acumulan 227.750 toneladas, lo que supone supone un aumento de 174.080 toneladas con respecto a octubre. A final de noviembre, las existencias totales alcanzaron las 321.148 toneladas, mientras que el stock previsto al cierre de la campaña 23/24 se estima en 189.691 toneladas.
La provincia de Sevilla ha avanzado en la cosecha de entre el 60 % y el 70 % de la aceituna, aunque se enfrenta a importantes dificultades. Los rendimientos grasos son notablemente bajos, situándose en torno al 16-17%, debido al alto contenido de humedad en las aceitunas y a las bajas temperaturas registradas en las últimas semanas, que han provocado heladas en diversas zonas. Si bien la cantidad de aceituna recolectada es similar a la aforada, estos bajos rendimientos apuntan a una producción de aceite inferior a lo esperado inicialmente.
A pesar de este escenario de menores rendimientos y una producción prevista más baja, el sector observa con preocupación una caída drástica e incontrolada de los precios en origen. Según ASAJA-Sevilla, no existen razones claras que justifiquen esta bajada, dado el stock de enlace limitado, las actuales existencias y la menor producción esperada.