El estado fenológico dominante del cultivo del algodón durante todo el mes de julio ha sido “B” (Botones), comenzando el periodo de formación del fruto, tal y como informa la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF). A finales de julio, en Sevilla, predominaba ya el estado “P” (Cápsulas pequeñas). Las primeras cápsulas grandes se empezaron a observar en Cádiz a primeros de julio, detectándose éstas en el resto de provincias algodoneras la tercera semana de julio.
Las altas temperaturas de la primera mitad de julio favorecieron al cultivo, obligando, no obstante, a tener que realizar riegos de forma generalizada, dada la alta tasa de evapotranspiración de las plantas. Actualmente (finales de julio) el desarrollo vegetativo y reproductivo del algodón es óptimo, en general. Se están dando riegos de manera generalizada en todas las provincias, así como aplicaciones con regulador de crecimiento en algunas parcelas de Cádiz y Sevilla.
En cuanto a araña roja (Tetranychus urticae), su presencia ha sido leve, por lo general, en casi todas las provincias; destacando Cádiz, con una media provincial del 4.6% de plantas ocupadas, registrada la primera semana de julio. En el resto de las provincias algodoneras, la media provincial ha oscilado entre el 0.4% de Jaén y el 1.9% de Sevilla. Se han realizado tratamientos acaricidas en las parcelas que superaron el umbral del 20% en Cádiz y Sevilla.
Referente a pulgones (Aphis gossypii), su aparición ha sido también leve por lo general, con niveles de presencia entre el 0.2 (nivel de 0 a 3) de Sevilla y el 0.7 de Cádiz; efectuándose tratamiento químico para su control en las parcelas más afectadas (con un nivel superior a 1.5) en todas las provincias.
La presencia de mosca blanca (Bemisia tabaci) ha sido leve, con medias provinciales situadas entre las 1.3 pupas/hoja de Sevilla y las 4.6 de Córdoba, registradas a finales de julio. Se han aplicado tratamientos para controlar a esta plaga en las parcelas más afectadas de todas las provincias, excepto en Jaén.
En relación a heliotis (Helicoverpa armigera), las medias provinciales de puestas han variado entre los 1.600 huevos/ha de Jaén y los 6.200 de Córdoba; mientras que las larvas pequeñas/ha han estado entre las 1.500 de Sevilla y las 5.700 de Cádiz. Se han realizado tratamientos insecticidas para controlar a esta plaga en todas las provincias, excepto en Córdoba.
La RAIF recomienda prestar especial atención a su evolución, efectuándose muestreos periódicos con el fin de constatar la presencia o no de puestas y/o larvas de esta plaga, así como su incidencia, para poder planificar una adecuada estrategia de control. En este punto, es importante conocer la previsión meteorológica a corto plazo, ya que las altas temperaturas de más de 35°C pueden ejercer un control natural de la plaga, abortando puestas y diezmando la población de larvas (sobre todo las más pequeñas).
En cuanto a la presencia de larvas de earias (Earias insulana) sobre el cultivo, las medias provinciales se han situado entre las 1.000 larvas pequeñas/ha de Cádiz y Sevilla, y las 4.700 de Córdoba. Hasta la fecha no se han realizado tratamientos en ninguna provincia algodonera. Atención a esta plaga en las provincias de Córdoba y Jaén, pues sus niveles de presencia suelen ser muy elevados, según datos de la serie histórica.
Referente al gusano rosado (Pectinophora gosypiella), los valores de capturas de adultos en trampas han registrado casi nulas capturas en Jaén (0,09 adultos/trampa y día) y 16.2 adultos/trampa y día de Cádiz. Se han observado “farolillos” (flores atacadas por larvas de la 1ª generación de esta plaga) en Cádiz y Sevilla, con índices muy bajos de presencia. En cuanto a cápsulas atacadas por larvas de esta plaga, se han observado éstas únicamente en las provincias de Cádiz y Sevilla, con unas medias provinciales máximas de 0.5% y 0.06%, respectivamente. Se han realizado tratamientos para repeler el vuelo de adultos solamente en las provincias de Cádiz y Sevilla.
En el caso de las chinches fitófagas (Lygus sp. y Creontiades sp.), los niveles poblaciones de las ninfas de estas plagas han sido bajos hasta la fecha, entre 9.200 ninfas/ha de Jaén y 30.000 de Córdoba. Por el momento no se han realizado tratamientos para su control en ninguna provincia.
