La Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural ha publicado hoy en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) la ampliación hasta el 24 de septiembre del plazo para presentar las solicitudes de ayudas para inversiones destinadas a modernizar las explotaciones agrarias de la convocatoria 2016, que se enmarcan en el Programa de Desarrollo Rural de Andalucía 2014-2020, como ya adelantamos desde ASAJA-Sevilla en esta página web el pasado 7 de agosto. Los productores interesados en acceder a estas subvenciones dispondrán de más tiempo para realizar los trámites, ya que inicialmente el plazo expiraba el 31 de agosto.

Inicialmente las ayudas para inversiones destinadas a mejorar los resultados económicos de las explotaciones agrarias y facilitar la reestructuración y modernización de las mismas, correspondientes a la convocatoria de 2016, podían solicitarse hasta el 31 de agosto. Sin embargo, y dado el interés que han despertado en el sector y con el objetivo de permitir que todo aquel que este interesado pueda soliicitarlas, la Consejería de Agricultura ha ampliado el plazo de presentación hasta el 24 de septiembre. 

A estos incentivos pueden acogerse agricultores o agrupaciones de agricultores que sean titulares de explotaciones agrarias ubicadas en Andalucía, así como los jóvenes que, a pesar de no tener una explotación en el momento de la presentación de la solicitud, se conviertan en titulares de una antes del pago de la ayuda.

La Consejería de Agricultura abre hoy martes 31 de mayo el plazo para solicitar ayudas para inversiones destinadas a mejorar los resultados económicos de las explotaciones agrarias y facilitar la reestructuración y modernización de las mismas para 2016.

El plazo de presentación de las solicitudes es de tres meses a contar desde esta fecha. Es decir, los interesados pueden realizar los trámites desde hoy y hasta el día 31 de agosto.

El uso del agua de riego en España ha experimentado un descenso progresivo, al pasar de 17.681 hectómetros cúbicos en 1999 a 15.833 en 2012, lo que supone una reducción superior al 10% en ese periodo, tal como se desprende de los últimos datos de la encuesta  sobre el uso del agua en el sector agrario del Instituto Nacional de Estadística.

Estas cifras, contrastan, sin embargo, con los datos sobre superficie regada en España, que  constatan un incremento moderado pero constante, desde hace más de una década, al pasar de3.367.486 hectáreas en 2002 a 3.605.121 hectáreas en 2014. Una tendencia al alza que se recoge en el informe sobre regadíos en España realizado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.