El pasado 20 de junio falleció en Sevilla Antonio Milla Jiménez a los 90 años de edad. Pintor, académico de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría y socio de Honor del Ateneo de Sevilla fue durante más de 15 años presidente del concurso de pintura infantil que cada año, coincidiendo con el día internacional de los derechos del niño, organiza ASAJA-Sevilla con la colaboración de la Caja Rural.
Antonio Milla es uno de los artistas más reconocidos del pasado siglo XX dentro de la escuela sevillana de pintura. Era natural de Alájar (Huelva) y era un gran enamorado del campo y el mundo rural. Tenía una enorme fe en los niños y en su fuerza creativa, por lo que consideró siempre un honor presidir el concurso de pintura infantil de ASAJA-Sevilla. Esta ha sido probablemente la actividad de la que más pena le dio retirarse, tal como él mismo nos manifestó hace un par de años, cuando presentó su renuncia debido a sus múltiples achaques.
En su carrera se cuentan numerosas exposiciones en diversas ciudades españolas. Sus lienzos se encuentran en el Ayuntamiento y Diputación de Sevilla; en la Delegación de Cultura y Turismo de la Junta de Andalucía; en el Ateneo de Sevilla, en el museo Zabaleta de Jaén o en el propio Ayuntamiento de Alájar, además de en numerosas colecciones privadas.
Fue miembro fundador junto con otros artistas, escultores y poetas, del grupo La Camilla Guadalquivireña y más tarde La Joven Escuela Sevillana, que entre 1952 y 1958 realiza una profusa y variada actividad artística.
Entre otros premios, fue galardonado con el «Gonzalo Bilbao» del Ayuntamiento de Sevilla en 1958, la beca «Bartolomé Esteban Murillo» de la Diputación de Sevilla en 1960 o la «Diego Velázquez» de la misma institución en 1962. Gran viajero por toda Europa, Rusia o los EEUU, ejerció la docencia en la antigua Universidad Laboral de Sevilla durante más de 30 años y en otros centros, caso del Colegio San Alberto Magno.