Tal y como informamos en anteriores ocasiones, en el marco de su apuesta por una agricultura sostenible, Syngenta desarrolla un proyecto europeo para favorecer un mejor conocimiento de la Agricultura de Conservación en cultivos herbáceos. El proyecto, que se desarrolla simultáneamente en España, Reino Unido y Francia, compara en nueve parcelas demostrativas tres manejos de cultivo diferenciados a partir de una rotación anual de cereales (trigo duro), oleaginosas (girasol) y leguminosas (garbanzo).
Los sistemas de manejo que se llevan a cabo incluyen el laboreo convencional y sistemas basados en Agricultura de Conservación, de manera que se puedan obtener unos resultados adaptados a las condiciones particulares de las distintas regiones agroclimáticas. En este proyecto, Andalucía cobra especial protagonismo, ya que las fincas piloto en España se encuentran situadas en las comarcas de La Campiña y Las Marismas, en concreto, en los términos municipales de Osuna y Lebrija, respectivamente.
El proyecto, que comenzó en 2018, se encuentra ya en su tercera campaña de trabajo. Pese a que las escasas precipitaciones de 2019 influyeron negativamente en los rendimientos de todos los cultivos herbáceos de secano, los datos preliminares de las dos primeras campañas invitan al optimismo. Y es que, si se tiene en cuenta el cómputo global de los datos obtenidos durante las dos primeras campañas en las parcelas de trigo, girasol y garbanzo, el sistema de manejo basado en Agricultura de Conservación y las recomendaciones de Syngenta obtiene una mayor rentabilidad en ambas fincas piloto. Lo que demuestra que es perfectamente compatible una agricultura productiva mejorando la rentabilidad para el agricultor con el cuidado de los recursos naturales y la protección del medioambiente.
2020 es un año fundamental en el desarrollo de este proyecto, puesto que se culminará la rotación completa de cultivos fijada en el diseño inicial del proyecto, por lo que se espera que se puedan obtener unos datos aún más concluyentes y que confirmen la importancia de apostar por técnicas de Agricultura de Conservación.
El proyecto, en el que colabora ASAJA-Sevilla y que cuenta con el apoyo técnico de la Asociación Española de Agricultura de Conservación, se enmarca dentro del plan de desarrollo sostenible de Syngenta, que pretende favorecer la biodiversidad y hacer una mejor gestión de nuestros suelos mediante la mejora de los niveles de materia orgánica y de la calidad del agua, y que gracias al uso de buenas prácticas agrarias y sistemas como la Agricultura de Conservación se ven notablemente favorecidos.