Teniendo en cuenta que Tetranychus urticae, ácaro que afecta sobre todo a mandarinos, tiene un óptimo de desarrollo en torno a los 30ºC y que soporta bien el ambiente seco, la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF) advierte de que las temperaturas máximas previstas por la AEMET en estos días en zonas y provincias de interior,  que superarán los 30ºC, es un factor favorable para el desarrollo de la araña roja, que aumentará el riesgo de daños tanto en hojas como en frutos recién cuajados.

A día de hoy su presencia en las principales provincias citrícolas de Andalucía está siendo muy baja, aun habiéndose registrado en las últimas dos semanas temperaturas en torno a los 30ºC. La RAIF recuerda que desde principios de abril hasta mediados de mayo las lluvias han sido frecuentes y las temperaturas frescas, ambiente por tanto desfavorable para su desarrollo y dispersión, partiendo en estos momentos, lo más probable, de una baja población.

Sin embargo, el estado fenológico actual es especialmente crítico. De ahí el aumento del riesgo de daños a partir de ahora. Los frutos se encuentran en el estado fenológico “cierre del cáliz”, son pequeños y de color verde intenso. Con estas características tanto la presencia de araña roja como sus daños pueden pasar inadvertidos, observándose éstos cuando los frutos inicien el envero.

Por ello se aconseja, especialmente en esta época, y siempre que las temperaturas sean altas y la humedad relativa entre baja y moderada, realizar su muestreo para constatar su presencia/daños en hojas y/o en frutos.

El Reglamento de Producción Integrada de Cítricos recomienda el control poblacional de araña roja a partir del 10% de hojas con formas móviles o más de un 2% de frutos afectados, si bien, habrá que tener en cuenta, previamente, la presencia de fauna auxiliar autóctona y evaluar su población respecto a la de T. Uticae, favoreciéndola si hiciera falta para evitar así el control químico.