A nivel andaluz, la situación de polilla del olivo es tan diversa como la fenología existente en cada provincia, y dentro de cada una de ellas, en las distintas zonas olivareras, tal como informa la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía.
En Huelva, Córdoba y Sevilla la fenología dominante es “G2” (Fruto cuajado), en Cádiz, Málaga y Jaén “G1” (Caída de pétalos), y en Granada “F” (Floración). Como estados más atrasados se observa “F” (Floración), en las zonas de sierra de Córdoba, Málaga y Jaén, e incluso algo de “D3” (Corola cambio de color), en zonas de Granada en las que aún no se ha iniciado la floración.
Nos encontramos estos días desarrollándose aún la generación antófaga en zonas tardías con floración poco avanzada y la generación carpófaga que está en pleno desarrollo, principalmente en las provincias occidentales, más adelantadas fenológicamente, que se encuentran en “G2” (Fruto cuajado). Podemos destacar esta campaña, en general, niveles elevados de capturas y formas vivas (en ambas generaciones), aunque el momento en el que se encuentra la plaga difiere bastante de una provincia a otra.
En cuanto a las capturas de adultos son muy variables, destacando Sevilla que alcanza una media provincial de 128 adultos/trampa y día, Córdoba con 54 y Huelva con 45.
Se realizan muestreos en los frutos cuajados, para valorar los índices de formas vivas de la generación Carpófaga, en todas las provincias a excepción de Granada. Principalmente en Huelva, Sevilla, Córdoba y Cádiz, y en menor medida en Málaga y Jaén, que presentan aún zonas más tardías que están en la generación antófaga.
Los mayores índices se registran en Sevilla, Huelva y Córdoba, con un porcentaje medio provincial de aceitunas con prais vivo del 52%, 53% y 46%, respectivamente, seguidas de Jaén con un 27% (destacan las Zonas Biológicas de Sierra Morena, Campiña Norte y Loma Baja).
El porcentaje de huevos eclosionados respecto a vivos está en aumento, destacando Huelva y Sevilla con un 19% y 18% respectivamente, seguidas de Córdoba con el 9%. En cuanto al % de huevos vacíos destacan Sevilla, Huelva y Córdoba, con un 26, 19 y 12% respectivamente.
En el caso de tomar la decisión de controlar su población mediante tratamiento fitosanitario, hay que tener en cuenta que el Reglamento de Producción Integrada de olivar contempla como momento de intervención cuando se alcance/supere un 20% de aceitunas con prays vivo y en torno a un 20% de huevos eclosionados respecto a vivos. La RAIF recomienda pues, evaluar la incidencia en cada parcela, para determinar el momento óptimo de intervención, en caso necesario. Conviene tener en cuenta las altas temperaturas dentro de la estrategia de control, ya que limitan la viabilidad de la puesta, y pueden provocar una mortandad de huevos considerable.
Es importante resaltar que las condiciones ambientales condicionan claramente la supervivencia y actividad de este agente: Altas temperaturas y baja humedad limitan la viabilidad de las puestas, y por el contrario si son suaves favorecen su desarrollo, penetrando la larva en el fruto. Se recomienda evaluar los índices a nivel de cada parcela, y tener en cuenta las condiciones meteorológicas, como parte de la estrategia de control. Consulte la predicción meteorológica y los datos registrados en las Estaciones Agrometeorológicas próximas a su olivar.
En cuanto a la generación antófaga, continúan todavía realizándose observaciones en las inflorescencias en zonas tardías, principalmente las zonas de sierra. No obstante hay que tener en cuenta que las altas temperaturas que se prevén acelerarán la apertura de flor en dichas zonas. Ha destacado el 20 % de inflorescencias con formas vivas de Córdoba (registrado en Sierra Morena y Subbética), el 5% de Jaén (Sierra Segura, Campiña Sur y Loma Baja). En zonas de sierra se recomienda prestar atención estos días en los olivares tardíos, en los que aún haya abierto poca flor. En la provincia de Granada se realiza el seguimiento de esta generación, aunque de momento con índices bajos, una media provincial del 2’3%.
Se recomienda evaluar los niveles en cada parcela, teniendo en cuenta que sólo en el caso de una floración baja y una población alta de Prays puede haber una merma importante de la producción debido a esta generación. El Reglamento de Producción Integrada de olivar contempla como momento idóneo para tomar la decisión de intervenir químicamente sobre este agente cuando se alcance el 20% de flores abiertas, y teniendo en cuenta:
Una parcela podría ser susceptible de tratamiento con menos de 10 inflorescencias por brote, menos del 20% de flores fértiles y más de un 5% de inflorescencias dañadas con formas vivas.
