La adopción, por parte de la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural del Parlamento Europeo, del dictamen sobre el llamado Reglamento Ómnibus sobre la Revisión del actual Marco Financiero Plurianual que afecta a numerosos reglamentos comunitarios que rigen distintas políticas en la UE, entre los que se enmarcan los reglamentos relativos a la PAC, supone un paso importante para lograr adaptaciones y mejoras en el actual marco regulatorio de la Política Agrícola Común, sin tener que esperar a una reforma de la PAC, que se anuncia para más adelante.
Una de estas mejoras necesarias era la inclusión de la dehesa y el monte mediterráneo en la denominación de superficies de pasto permanente. Con esta decisión nuestro ecosistema productivo ganadero dejará de verse seriamente penalizado por no adaptarse plenamente a la actual definición reglamentaria ya que no es ni superficie predominantemente de gramíneas, ni de forrajes herbáceos.
Una reivindicación constante de ASAJA
Esta inclusión ha sido una reivindicación constante de ASAJA en los últimos años, ya que nuestros productores se han visto injustamente penalizados en sus solicitudes PAC como consecuencia de la aplicación de un Coeficiente de Admisibilidad de Pastos que no reconocía la especificidad de este ecosistema singular que constituye la dehesa, donde las producciones leñosas no solo contribuyen a generar pasto, sino también producen ellas mismas fuentes de alimento para nuestra ganadería extensiva.
ASAJA ha mostrado su rechazo al CAP en numerosas ocasiones y ha sido la única organización agraria que ha llevado a cabo acciones de protesta para pedir su supresión.
12.000 ganaderos andaluces afectados
La aplicación de este coeficiente ha reducido ya la superficie de pastos de las explotaciones ganaderas andaluzas en 782.000 hectáreas, causando un grave perjuicio a más de 12.000 ganaderos de ovino, bovino, porcino y caprino, que con el pastoreo mantienen la dehesa y el monte y contribuyen a la lucha contra los incendios forestales.
Como ha denunciado ASAJA, los ganaderos andaluces se han visto indefensos al ver que cada año se les ha aplicado un Coeficiente de Admisibilidad distinto, existiendo situaciones en las que un propietario de 200 hectáreas de dehesa con ganadería extensiva declare en 2012 todas sus hectáreas como pastables para acogerse a las ayudas, en 2013 el coeficiente sólo le admita 180 hectáreas, y que en 2015 sus animales sólo puedan pastar en 100 de ellas.
Un buen trabajo de PP y PSOE
Las enmiendas de los eurodiputados socialistas y populares al Dictamen del PE sobre el capítulo agrícola del Reglamento Ómnibus, han sido recogidas por los ponentes y aprobadas por mayoría en la Comisión de Agricultura, por lo que es justo reconocer el trabajo realizado por las responsables agrícolas del Grupo Popular (Esther Herranz) y del Grupo Socialista (Clara Aguilera) y felicitarlas por el resultado obtenido.
Por otra parte, el Consejo de Ministros de Agricultura ya dio el visto bueno a las propuestas de la presidencia maltesa de la UE, que también incluían una modificación de la definición de pastos permanentes que daba plena cabida a la dehesa mediterránea.
Desde ASAJA confiamos, por tanto, que esta modificación, importante y positiva para los intereses de nuestra ganadería extensiva, salga adelante en las próximas negociaciones con el Consejo y la Comisión, en los llamados trílogos, que se deberán desarrollar en los próximos meses de cara a la puesta en marcha del reglamento para el año 2018.
El consenso es fundamental
Para ASAJA-Sevilla conseguir el consenso para una nueva definición de pastos permanentes es fundamental de cara a la próxima PAC, pues en la reforma actual se ha cometido una injusticia con España por el CAP y ahora hay una nueva oportunidad de enmendarlo.
A este respecto, ASAJA-Sevilla aboga por que se reconozcan los pastos leñosos y su utilización para alimentación animal y que se ponga fin de una vez a las comparaciones entre un bosque maderero del norte de Europa y el sistema agrosilvopastoril de las dehesas propias de los países mediterráneos.
Los cambios que se aprueben con consenso podrían aplicarse a partir de 2018, mientras que los que no, volverían a discutirse en el marco de la PAC 2020-2027.
Seguramente te interesarán estos artículos:
Ganaderos convocados por ASAJA se concentran en Sevilla para protestar por el CAP
Andalucía pierde en dos años casi la mitad de los terrenos pastables por la aplicación del CAP
El Coeficiente de Pastos incide sobre el valor patrimonial de las dehesas