La producción de aceite de oliva crecerá un 2,3 % por año en la Península Ibérica hasta 2030, impulsada por la expansión de los regadíos y por las nuevas plantaciones que mejoran los rendimientos, según un informe sobre perspectivas de los mercados agrícolas de la Comisión Europea (CE), del que informa Efeagro.
El documento apunta que durante este periodo caerá el consumo de aceite de oliva en los grandes países productores europeos, aunque aumentará en el resto de la Unión Europea, y también augura que las exportaciones repuntarán en los próximos ejercicios.
A nivel de la Unión Europea, en 2030 la producción esperada se incrementará un 5 % por encima del nivel medio de 2015. En Italia, esta subida podría alcanzar el 2 % anual, mientras que en Grecia avanzará a un ritmo más lento (+1,1 % por año).En ambos países, esta progresión estará basada en mejoras de rendimiento, mientras que el área de cultivo se mantendrá.
Sin embargo, el informe reconoce que esta evolución podría verse afectada en tierra italiana por las condiciones climáticas, las disponibilidad de agua y posibles brotes de “Xyllela fastidiosa” en el país.
En general, el avance del regadío y los cultivos intensivos de olivos podrían reducir la variabilidad de la producción cada año, aunque el informe aboga por impulsar esquemas que mejoren la creación de valor de este producto, como etiquetas de calidad, indicaciones geográficos o aceites orgánicos.
Ha recordado que en los últimos años, la producción de aceite de oliva de la Unión Europea (UE) se ha caracterizado por altas fluctuaciones, a pesar de las inversiones realizadas en regadíos.
En este sentido, el informe recoge, por ejemplo, que la cosecha del ejercicio 2016-2017 se redujo en un 25 % debido a condiciones climáticas desfavorables y a los daños en olivares causados por “Xyllela fastidiosa” (en referencia a la expansión de la bacteria por el sur de Italia).
En algunos países de la UE -matiza- la recuperación de la producción se espera para la actual campaña, pero el nivel esperado continúa por debajo del nivel promedio de la campaña 2015-2016.
La producción de la UE está dominada por cuatro principales países productores -España, Italia, Grecia y Portugal-, que representan juntos el 99 % del total comunitario y más de dos tercios de producción mundial.
Baja el consumo en los grandes países productores, sube en el resto
Respecto al consumo, indica que la evolución en la UE se caracterizó por una menor demanda en esos cuatro principales estados; descenso que fue más pronunciado durante la crisis financiera y, más recientemente, provocado por los altos precios, que han dejado el índice en 8,5 kilos por persona en 2016.
El consumo bajará para 2030 en estos grandes países productores europeos, pero a un ritmo más lento y subirá en el resto.
Por otra parte, y dada la fuerte demanda mundial y el aumento de la producción que se espera en la UE, las exportaciones comunitarias aumentarán en los próximos años, aunque de manera más moderada que en el período 2006-2013, cuando lo hicieron al 4,7 %.
En este sentido, augura un repunte del comercio exterior de aceite de oliva de la UE del 3 % al año hasta 2030, mientras que las importaciones permanecerán estables, lo que fortalecerá la posición exportadora comunitaria, subraya el informe.
