La aplicación de la Política Agraria Común (PAC) en 2018 viene cargada de importantes novedades para los agricultores y ganaderos andaluces, que deben tenerse en cuenta, desde ya, de cara a la planificación de cultivos de la próxima campaña. Como publica la periodista Inma Lopera en ABC, una de estas novedades es la prohibición de usar productos fitosanitarios en las Superficies de Interés Ecológico (SIE), uno de los compromisos a cumplir por los agricultores que opten a cobrar las ayudas del pago verde.
En este sentido, Asaja Sevilla recuerda que en aquellas explotaciones de más de 15 hectáreas de tierra arable, se debe dejar al menos un 5% del terreno como SIE. En ese porcentaje, los agricultores tienen dos opciones: o bien dejan la tierra vacía (en barbecho) o bien la hacen productiva sembrando cultivos fijadores de nitrógeno. Entre éstos, la alfalfa, cultivo en regadío muy asentado en el Bajo Guadalquivir, se verá seriamente perjudicado, al igual que los cultivos proteicos como el garbanzo, las habas y los guisantes, los más habituales en el campo andaluz.
Adjuntamos el artículo completo de ABC